Fantástico

Había una vez un país, no muy lejano, donde pasaban las cosas más peregrinas que imaginarse pueda. En los muchos trozos en que estaba subdividido, mandaban algunos reyezuelos a los que se les permitía dar rienda suelta a toda clase de caprichos. Uno se costeaba una amante en islas paradisíacas, con dinero público. Otro afanaba dinero de todos en el interior de un automóvil. Una parte considerable del país, hacia levante, estaba carcomida por una caterva de maleantes encumbrados. En otra especie de región nacional –no se extrañen, el oxímoron era moneda corriente en ese país- el erario había sido devastado por una familia insaciable. Otro par de trozos, de la misma arcana consistencia política, ejercían libertad absoluta en sus fiscalidades, sin que nadie osara meter la nariz en ellas. El propio Tribunal de Cuentas no contaba nada, salvo parientes y amigos colocados en sus despachos. El partido del gobierno, cual si de un trozo más se tratara, había sido señalado por la Justicia como practicante inveterado de financiación ilegal, pero sus dirigentes quedaban milagrosamente exentos de responsabilidad alguna. Los multimillonarios eran disculpados de sus abultadas fortunas en el extranjero, con amnistías acomodadas y palmaditas en la espalda. Un viceministro de Hacienda resultó ser un defraudador de tomo y lomo. En el colmo de la extravagancia, la vicepresidenta del Parlamento, mientras ejercía de Presidenta en solemne sesión plenaria, había sido pillada jugando en su tablet a un popular juego de princesas frígidas, al tiempo que su jefe, el Presidente del Gobierno, disertaba sobre asuntos de enjundia nacional.  Por acá y por allá, en toda la geografía patria, se mostraban, bien a las claras, las consecuencias de otras muchas debilidades. Aeropuertos tan relucientes como inactivos, enormes edificios culturales, bellos como vacuos, líneas férreas que nunca conocerían un tren, aparatosos museos y ciudades futuristas que se descanaban al sol cual osamentas prehistóricas… Y no pasaba nada. 
Algunos gobiernos de otras naciones, donde tales desmanes nunca se hubieran consentido, empezaban a preguntarse si no sería aquel un país realmente fantástico. Sus propios ciudadanos se tentaban y pellizcaban, unos a otros, no fuera a tratarse de un sueño maligno.        





Videoteca
Entrevista en el programa `Saca la lengua´
Emitido el 19 de Noviembre de 2011 en la 2 de RTVE
Una breve visión de la biblioteca
El programa `El público lee´ de Canal Sur TV entrevista a A. R. Almodóvar a propósito de su biblioteca (25-09-2011)
La memoria de los cuentos
A. R. Almodóvar es el guionista de este documental emitido por TVE2 en el programa `Imprescindibles´ (18-03-2011)
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